Nanotecnología para combatir acné
Combinando ultrasonido, con partículas cubiertas de oro y lásers, investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara, y la compañía Sebacia, han desarrollado un tratamiento de enfoque que podría reducir la frecuencia e intensidad de los brotes de acné.
La nueva tecnología se basa en terapia dirigida y la administración transdérmica de fármacos. Funciona utilizando ultrasonido de baja frecuencia, el tratamiento introduce las partículas de sílice recubiertas de oro a través del folículo a las glándulas sebáceas.
Una vez que las partículas son depositadas en la zona a tratar, se les apunta con el láser, y debido a que su recubrimiento de oro esta diseñado específicamente para interactuar con las longitudes de onda de infrarrojo cercano del láser, la luz se convierte en calor, mediante un proceso llamado resonancia de plasmones artificiales. Las partículas calentadas provocan al desactivación de las glándulas sebáceas. El sebo, la sustancias que bloquean los poros y las partículas son excretadas normalmente.
De acuerdo con el reporte, publicado en la revista Journal of Controlled Release, el protocolo tiene varios beneficios sobre los tratamientos convencionales. El método, llamado fototermólisis selectiva, no irrita ni reseca la superficie de la piel y tampoco tiene el riesgo a generar resistencia o efectos secundarios a largo plazo que los tratamientos antibióticos y sistémicos han demostrado.
La fototermólisis selectiva podría ser utilizada en pacientes con acné avanzado, severo y difícil de tratar. Ya se han realizado ensayos clínicos exitosos, sin embargo aún se están estudiando los efectos a largo plazo que puede conllevar, como la gravedad del daño folicular.